Morales
El caso de Bolivia nos plantea
lo que se dicen cuestiones morales:
quedarse sota, mirar neutrales
o abrir la boca, optar en la pelea.
El caso de Morales nos recrea
el de Allende, porque son iguales
causas, métodos y hasta los rivales:
es gente linda contra gente fea.
Que si Evo cae –digo, es un decir–
qué historia nueva con qué verso viejo.
Que si Bolivia –digo, es un sentir–
cae negra, tropieza en su pellejo,
chola, pelada por filo de sufrir...
Qué vergüenza en el verso de Vallejo.
Juan Sasturain (Página 12 – 15/09/08)
No quise quedarme sota, no quise ser neutral. Creé este blogfolio como parte del cursado de la Diplomatura en Educación y Nuevas Tecnologías. Pero como escribí en mi primer post, no sería yo si en el blog no compartiera mis gustos, mis pareceres, mis opiniones, en definitiva, mi subjetividad. Por eso hoy no quise hacerme “la sota” o “mirar neutral”. La crisis por la que está atravesando Bolivia me preocupa mucho, en primer lugar porque apoyo y creo en un proyecto de construcción de una sociedad más justa donde los que históricamente cargaron con el peso de la miseria para el beneficio de otros, conquisten el protagonismo y la justicia que merecen. En segundo lugar, porque estoy convencida que detrás del discurso político de autonomía, además de los intereses de las multinacionales estadounidenses, hay muchos años acumulados de desprecio, el odio que sienten los bolivianos blancos por las diferentes etnias originarias. El racismo como fuente e instrumento del dominio y explotación económica. La pintada en una de las paredes de Santa Cruz lo decía clarito: “fuera collas de mierda.” ¿Qué hacer? Recojo el guante de Sasturain y abro la boca, luchando desde mi lugar y con las armas que tengo: la palabra. Fluyo en la palabra, con mis amigos, con mis compañeros, con mis alumnos, en este espacio que también es mi campo de batalla.
Etiquetas: Bolivia
3 Comments:
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Comparto tu ideal enla búsqueda de la construcción de un mundo mejor, más justo, y no construído sobre la miseria de muchos.
Creo firmemente que vamos hacia esa tierra nueva, pero cundo estamos transitando, el camino se hace lento, muy lento y quedan en él muchas personas, que sufren hambre, desprecios y privaciones.
También creo que la "Educación" es liberadora, promueve a las personas y es lo que tenemos en nuestras manos para colaborar con el cambio.
Es un gusto visitar tu blog, como siempre aprendo muchísimo de vos,gracias por compartir con todos el conocimiento Elena
No podía pasar sin dejarte mi opinión. Cuando pasa lo de Fuentealba al volver a la escuela, llevé un artículo de Bayer: Ética y estética del poder... Tiene una riqueza impresionante, lo trabajamos con los chicos y yo sin ser del área de las humanísticas pude participar. Todo lo que nos pasa, como siempre digo, no es casual. Lo importante como vos decías es participar, eso implica jugarse... pero cuántos realmente se la juegan? cuántos se pasan la vida mirando la pelusa de su ombligo?... Cuando vamos a aprender que si estamos convencidos de que algo es injusto tenemos que pelear por ello? Cuándo vamos a dejar de ir por la vida sentados en el asiento de atrás mirando como nos pasan las cosas, sin tomar el volante y tener la posibilidad de decir hacia dónde queremos ir?
Patri
Esa es la sensación con la que me quedo despúes pasar unos mínutos por tu blog y detenerme a leer.
Siempre temo que subjetividad me juegue en contra, tengo tanto descreimiento en lo que nos muestran los medios que siempro pienso que detrás de esto siempre hay alguna motivación para sacar tajada.
Cuando hace unos días los tristes episodios de Bolivia, me sorprendi de que se rehibindicara a los pueblos originarios y se apoyara la politica oficial, despúes de leerte siento tranquilidad en haber pensado lo que pense, y en soñar muy contrariamente a lo que muchos desean en una verdadera integración latinoamericana, alla se pelean entre ellos, aca los discriminamos en todas sus formas.